Cuando en una comunidad de vecinos se plantea la realización de una rehabilitación, casi siempre obligados por la existencia de alguna patología importante (grietas, humedades, oxidaciones, desprendimientos) o porque se quiere mejorar la calidad de vida de los usuarios (barreras arquitectónicas, mejora de los aislamiento, iluminación), se pone en marcha un procedimiento muy poco recomendado.
-Vamos a llamar a Benito que le hizo la fachada a los de al lado y ha quedado muy bien.
-Vale y para tener un comparativo también al que anuncian en la radio.
-Espera… mejor tres, le pediré a mi primo que trabaja en una empresa que se dedica a la rehabilitación.
-Igual el Administrador de fincas también conoce a alguien. Pues sí…
En fin, al de dos meses se presentan cuatro o cinco ofertas de otras tantas empresas de rehabilitación y cada una de ellas propone diferentes actuaciones, con diferentes sistemas, diferentes materiales y plazos variados.
En la siguiente reunión de vecinos, donde supuestamente se va a decidir qué hacer y con quién, comienzan las dudas. Con estas, las preguntas y con ellas, pocas respuestas objetivas. LAS OFERTAS NO SON COMPARABLES.
El precio dado no es objetivo. Cada empresa ha presentado sistemas diferentes: dos con SATE, una fachada ventilada y otras dos solo arreglan las grietas y pintan. ¿Será suficiente? Diferencias económicas importantes. Al vecino que le entra agua por la cubierta le da igual la fachada. En definitiva tantas opiniones con vecinos por cada una de las ofertas para la rehabilitación. Un caos y una verdadera complicación el decidirse.
Por todo ello es importante el contar con un equipo técnico experto en patologías, rehabilitación y resolutivo a la hora de dar salida a los problemas de seguridad, estanqueidad, aislamientos y accesibilidad que toda comunidad de propietarios padece.
Para un resultado satisfactorio y evitar los inconvenientes, tres son las acciones imprescindibles: Realización de un estudio exhaustivo de las patologías y planteamiento de soluciones constructivas eficientes, técnica y económicamente viables. Y sobre un Proyecto de rehabilitación único la solicitud de ofertas y adjudicación de las obras.
Por otra parte, la participación de los tres intervinientes necesarios en cualquier proceso constructivo, Propiedad, Proyectista y Constructora es fundamental para que cada uno actúe según sus conocimientos y responsabilidades.
Sobra decir que en estudio.k, entre otras actividades, también somos expertos en estos trabajos.
¡Ánimo en la próxima reunión de propietarios!
Aitzol Landaburu